Tras un paréntesis de tres meses por dificultades de abastecimiento y la deuda del gobierno en el pago de bonos, la emblemática fábrica retoma la fabricación de Amarok y Taos, señalando un cambio de rumbo en el sector.
La industria automotriz argentina mostró signos de recuperación este lunes, con la reanudación de operaciones en la fábrica de Volkswagen en General Pacheco, en la provincia de Buenos Aires, después de un período de suspensión que comenzó a fines de diciembre de 2023, debido a una compleja situación de deuda y falta de componentes.
Este retorno a la actividad ha sido posible gracias a la implementación del Bono de Oportunidad para la Regularización Económica (Bopreal) por parte del nuevo gobierno de Javier Milei, una medida diseñada para abordar la deuda acumulada de más de 8.000 millones de dólares que asfixiaba a diversas industrias, incluida la automotriz. Este instrumento financiero ha comenzado a normalizar la situación, permitiendo a Volkswagen y otras empresas retomar la producción.
La planta de Pacheco, conocida por ensamblar los modelos Amarok y Taos, ya ha iniciado la producción de unidades del facelift del pick-up, previsto para lanzarse al mercado este año.
La crisis de abastecimiento que llevó al cierre temporal de esta planta fue una consecuencia directa de las políticas económicas del anterior ministro de Economía, Sergio Massa, quien había prometido a las empresas fabricantes un reintegro en dólares al tipo de cambio oficial que nunca se materializó. Esta situación llevó a un endeudamiento insostenible y a la paralización de las actividades productivas, no solo en Volkswagen sino también en otras firmas como General Motors, que igualmente sufrió un cierre de casi tres meses.
Con la reactivación de la fábrica de Pacheco, Volkswagen se suma a otras empresas automotrices como Peugeot, Citroën, Fiat y Toyota, que ya han retomado la producción después del período de vacaciones extendido. Este es un paso crucial hacia la normalización de la industria y un indicador positivo de que, con las políticas adecuadas, es posible superar incluso los obstáculos más desafiantes.
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