Hyundai Tucson 2025 logra la máxima calificación de seguridad en Latin NCAP
- Benjamín Chellew
- hace 3 días
- 4 Min. de lectura
El Hyundai Tucson alcanzó la calificación máxima de cinco estrellas en la más reciente ronda de evaluaciones de Latin NCAP, convirtiéndose en el primer modelo de la marca en obtener esa puntuación bajo el protocolo vigente. El resultado representa un salto significativo para Hyundai en materia de seguridad y confirma la solidez del Tucson como uno de los SUV más completos y seguros del mercado, donde en Panamá es además uno de los modelos más vendidos de la marca.

En Panamá, el Tucson no solo es un éxito comercial, sino también uno de los modelos más visibles en las calles. Por eso, el resultado tiene un peso particular: el vehículo evaluado es exactamente el mismo que se vende en el país, producido en Corea y República Checa, con fecha de fabricación desde el 5 de abril de 2024.
Los resultados de Latin NCAP fueron contundentes. El Tucson alcanzó 83.98 % en protección de ocupante adulto, 91.62 % en infantil, 75.08 % en protección de peatones y usuarios vulnerables, y 96.28 % en asistencia a la seguridad. Detrás de esas cifras hay un avance tangible.
Hyundai no se conformó con lo conseguido en años anteriores y decidió reforzar su propuesta con seis bolsas de aire de serie, Control Electrónico de Estabilidad (ESC) y un completo conjunto de sistemas ADAS, como Frenado Autónomo de Emergencia (AEB) para ciudad y carretera, Asistente de Mantenimiento de Carril (LSS) y Detección de Punto Ciego (BSD).

La evaluación abarcó todas las pruebas clave: impacto frontal, lateral, de poste, whiplash (latigazo cervical), protección a peatones y efectividad de los sistemas de asistencia. En el impacto frontal, la cabina mostró una estructura inestable, pero aun así logró mantener una zona de los pies estable y una protección buena para la cabeza y cuello de los ocupantes delanteros. En las pruebas laterales, tanto el pecho como la pelvis y el abdomen mostraron un desempeño robusto, confirmando la efectividad del refuerzo estructural del SUV.
En el apartado infantil, el Tucson volvió a sobresalir. Latin NCAP destacó el desempeño casi perfecto de los sistemas ISOFIX y la protección total de los dummies de 1.5 y 3 años en impactos frontales y laterales. El modelo ofrece además desconexión estándar del airbag del pasajero y cinturones de tres puntos en todas las plazas, cumpliendo con los estándares internacionales.
En las pruebas de protección a peatones y usuarios vulnerables, el modelo cumplió con la norma UN 127, mostrando protección buena o adecuada en la mayoría de las zonas del capó y puntuación completa en el sistema AEB Peatones y Ciclistas. El control de estabilidad demostró una excelente capacidad de maniobra, superando el test de alce a 85 km/h, mientras que el AEB logró evitar colisiones a velocidades de hasta 70 km/h.
Para Latin NCAP, este resultado es un mensaje claro. Alejandro Furas, su secretario general, afirmó que “el primer resultado de cinco estrellas para Hyundai demuestra los esfuerzos del fabricante por implementar un cambio drástico hacia vehículos más seguros”
El contraste regional, el fracaso del Citroën Basalt
El mismo día en que el Tucson celebraba su desempeño, el Citroën Basalt, producido en Brasil, se llevaba la peor parte: cero estrellas. Latin NCAP detalló que su estructura es inestable, carece de airbags de cortina y no ofrece tecnologías ADAS ni siquiera como opción.

Aunque el Basalt no se comercializa en Panamá, su resultado sirve de contraste y pone en evidencia la disparidad entre fabricantes que apuestan por elevar sus estándares y aquellos que aún relegan la seguridad en los mercados emergentes.
“El contraste entre Hyundai y Stellantis refleja dos visiones corporativas opuestas. Hyundai decidió elevar la seguridad de sus consumidores; Stellantis continúa tomando decisiones que la comprometen”. Stephan Brodziak, presidente de la Comisión Directiva de Latin NCAP
Latin NCAP recordó además que diez modelos del grupo Stellantis evaluados desde 2020 no han superado las dos estrellas, y volvió a insistir en la necesidad de que los gobiernos latinoamericanos adopten un sistema de etiquetado obligatorio de seguridad vehicular que informe de forma clara a los consumidores.
Un SUV referente en Panamá
Lo más interesante del caso del Tucson es su evolución. En 2022, el modelo había obtenido cero estrellas. Ese mismo año, tras incluir airbags laterales y control de estabilidad, mejoró a tres. Hoy, con su actualización 2025, alcanza la máxima calificación. Tres años, tres saltos de calidad, y una transformación que va más allá de la hoja técnica: refleja un cambio de cultura dentro de Hyundai.
En Panamá, donde el Tucson ya es uno de los SUV más populares del segmento C, este resultado refuerza su posicionamiento. No solo por diseño o tecnología, sino por una apuesta clara por la seguridad, un aspecto que los consumidores valoran cada vez más al momento de elegir un vehículo nuevo.
Latin NCAP lo define como un caso ejemplar de cómo la presión de los programas de evaluación impulsa mejoras reales en los vehículos que circulan por nuestras calles. Y es justamente ahí donde radica el valor de este logro: la seguridad deja de ser un privilegio y se convierte en un estándar.