Cupra celebra su primer millón de autos: siete años de una historia que apenas comienza

Siete años bastaron para que Cupra pasara de ser una apuesta arriesgada a una de las historias más sólidas dentro del Grupo Volkswagen. Este octubre, la marca española alcanzó un hito importante: un millón de vehículos producidos en su planta de Martorell, en Barcelona, el mismo lugar donde comenzó su transformación industrial y su camino hacia la electrificación.

“Este logro demuestra la visión atrevida y la pasión incansable que impulsa nuestra marca”, afirmó Markus Haupt, CEO de Cupra. “Fabricar este millón de autos en Martorell refleja nuestro compromiso con la innovación, la electrificación y el futuro de la movilidad”.

Desde su lanzamiento en 2018, Cupra ha sabido construir una identidad propia dentro del grupo alemán, como la división deportiva de su matriz SEAT. Su historia comenzó con el Ateca, el SUV deportivo que marcó el punto de partida de la marca; continuó con el León, que consolidó su presencia en el mercado; y alcanzó una nueva etapa con el Born, su primer modelo 100% eléctrico.

A estos se suman el Tavascan y el Terramar, que representan la expansión hacia segmentos más grandes y electrificados, además del Formentor, el primer Cupra diseñado desde cero. En 2026 se unirá el Raval, un urbano eléctrico que se fabricará en Martorell y marcará el inicio de la nueva generación de autos compactos del grupo.

Cada modelo ha contribuido a darle forma a una marca que apuesta por el diseño expresivo, la innovación y una conducción con carácter, sin perder de vista su objetivo de liderar la transición eléctrica dentro de Volkswagen.

Martorell: el nuevo epicentro eléctrico del grupo

La fábrica de Martorell no solo es el hogar de Cupra, sino también el eje de la estrategia eléctrica del grupo en España. A través del programa Future: Fast Forward, la marca lidera una inversión de 10 mil millones de euros (unos 11,7 mil millones de dólares) , de los cuales 3 mil millones de euros (aproximadamente 3,51 mil millones de dólares) están destinados a la electrificación de la planta.

Allí se producirán el Cupra Raval y el Volkswagen ID. Polo, ambos sobre la plataforma MEB Small, que servirá de base para la próxima generación de vehículos eléctricos urbanos. La línea 1 de producción ya se encuentra en proceso de modernización para esta nueva etapa.

Para conmemorar el millón de autos fabricados, Cupra anunció un gesto simbólico: sorteará un vehículo entre sus empleados, reconociendo el papel que ha tenido cada persona en este crecimiento.

El crecimiento de Cupra no se detiene. Solo en el primer semestre de 2025, la marca entregó 167,600 vehículos, un 33% más que en el mismo periodo del año anterior, superando por primera vez las ventas de SEAT, que registró 135,000 unidades.

Este desempeño ha convertido a Cupra en la división de mayor expansión dentro del Grupo Volkswagen, un logro que combina estrategia, diseño y una comunicación muy clara hacia una nueva generación de conductores que buscan algo distinto.

Aunque su expansión hacia Estados Unidos se ha pospuesto hasta después de 2030, debido a las “dinámicas de mercado cambiantes”, la marca mantiene su enfoque en Europa, donde su comunidad y sus modelos siguen ganando terreno.

En apenas siete años, Cupra ha logrado lo que a otras marcas les tomó décadas: consolidar una identidad, una comunidad y una visión de futuro. Su combinación de diseño mediterráneo, tecnología alemana y espíritu rebelde la ha convertido en una de las firmas más interesantes del panorama automotriz europeo.