En la carrera por la conducción autónoma, todavía no existen autos que se conducen del todo solos, solo algunos modelos que tienen tecnología que aún requiere de cierta intervención por parte del conductor. Falta mucho para que la conducción autónoma de nivel 5 o total llegue a las carreteras, pero Elon Musk, CEO de Tesla, asegura que la tendrá lista para este mismo año.
Elon Musk durante la inauguración de la Gigafactory de Telsa en Shanghai Foto: Aly Song – REUTERS
“Estoy extremadamente seguro de que el nivel 5 o la autonomía esencialmente completa va a ocurrir y creo que ocurrirá muy rápido”, afirmó Musk en un videomensaje durante la apertura de la Conferencia Mundial de Inteligencia Artificial en Shanghái, que se celebra cada año.
No es la primera vez que el CEO de Tesla asegura que la conducción autónoma total estaba cerca. Ya en 2014 dijo en una entrevista con la CNN que para 2015 iba a tener un coche autónomo al 90%, algo que finalmente no ocurrió.
Por el momento la compañía fabrica autos equipados con el sistema de asistencia al conductor Autopilot y, según adelantó Musk, también está desarrollando nuevos sistemas de proyección de calor y de refrigeración para poder instalar computadoras más avanzadas en sus vehículos.
La industria no lo tiene tan claro, hasta el punto de que algunas compañías como Bosch estiman que el nivel 5 de conducción autónoma no será posible hasta 2024 o 2025. Ford, por su parte, fecha el lanzamiento del coche autónomo a gran escala en 2021. BMW, que ya tiene algún que otro prototipo con esta tecnología, estimaba que para 2021 el nivel 3 de conducción autónoma sería una realidad en las calles.
¿Qué es el nivel 5?
Es el máximo nivel de la clasificación propuesta por la Society of Automotive Engineers (SAE), que es la que se ha “estandarizado”. Cada nivel indica la capacidad mínima que debe tener el vehículo con respecto a la automatización de funciones y, en el caso del nivel 5 se refiere a:
El vehículo cuenta con sistemas de automatización de la conducción tanto para el control del movimiento longitudinal, como para el control del movimiento lateral, ambos a la vez.
El sistema cuenta con detección y respuesta ante objetos y eventualidades de manera completa.
Ya no es necesario un usuario preparado para intervenir si el sistema lo solicita o se produce un fallo. El propio sistema de automatización de la conducción cuenta con un sistema de respaldo para actuar en caso de fallo del sistema principal y poder conducir hasta una situación de riesgo mínimo.
No hay condiciones específicas limitantes para el funcionamiento del sistema, y por tanto el vehículo podría seguir conduciendo en todo momento o circunstancia.
No es necesario el conductor.
Múltiples estudios se han realizado sobre la aceptación del usuario a un carro autónomo, y aunque hay muchos entusiastas de esta tecnología, la verdad es que para muchos clientes la conducción autónoma no supone una mejora en su seguridad y por ende, no merece desembolsar el extra que puede suponer para el bolsillo.