Mitsubishi da otro giro radical al Eclipse con su nueva versión 100% eléctrica
- Benjamín Chellew
- hace 6 días
- 3 Min. de lectura
El nombre Eclipse despierta recuerdos en más de un entusiasta: aquel coupé japonés que brilló en los noventa, con motores potentes y apariciones en el cine y los videojuegos, era sinónimo de deportividad accesible. Mitsubishi revivió el nombre de forma polémica en 2017 para usarlo en un SUV que distaba mucho de lo deportivo y hoy esa denominación tomó otro giro total. El nuevo Eclipse Cross 2026 será un SUV eléctrico por lo menos por ahora solo para Europa y con hasta 600 km de autonomía.

El Eclipse original tenía un carácter rebelde: líneas deportivas, motores con personalidad e incluso un V6 que superaba los 260 caballos. Cuando Mitsubishi decidió usar el nombre en 2017 para un SUV compacto, la polémica no se hizo esperar. Ahora, con la llegada de esta versión 100% eléctrica, esa discusión vuelve a encenderse. ¿Es un homenaje a la historia o una estrategia de mercadeo que diluye lo que significaba el Eclipse? Lo cierto es que, polémicas aparte, este nuevo modelo refleja el rumbo inevitable de la marca: electrificación total en un mercado donde no hay espacio para mirar atrás.
Diseño con sello propio
Aunque comparte plataforma con el Renault Scenic E-Tech, como parte de la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, el Eclipse Cross EV no se limita a ser un clon. Mitsubishi le ha dado un frente marcado por la evolución del Dynamic Shield, con parrilla cerrada y luces LED en forma de “J”. Los rines de 20 pulgadas con diseño geométrico y la parte trasera con el concepto Hexagonal Stability aportan robustez y un aire futurista.

Por dentro, el cambio es radical frente al viejo Eclipse Cross. El tablero ahora está dominado por dos pantallas de 12,3 pulgadas, integradas con el ecosistema Google para ofrecer Maps, Assistant y aplicaciones desde Google Play.
Se suma conectividad inalámbrica con Apple CarPlay y Android Auto, un sistema de sonido Harman Kardon y hasta un techo panorámico electrocrómico que se puede oscurecer o dejar transparente con solo tocar un botón. La ambientación se completa con 48 colores de iluminación ambiental, pensados para darle al interior un aire más personal y sofisticado.
La primeras variantes llegarán con un motor delantero de 215 caballos y una batería de 87 kWh que permite hasta 600 km de autonomía bajo ciclo WLTP. Acelera de 0 a 100 en 8,4 segundos y alcanza 170 km/h, cifras suficientes para un SUV de su tamaño. En 2026 se sumará una variante más asequible con batería de 60 kWh y unos 400 km de autonomía. Además, ofrece carga rápida de hasta 150 kW, regeneración ajustable en cuatro niveles y conducción “One-Pedal”, lo que hace más fácil moverse en ciudad.

El Eclipse Cross EV está cargado con más de veinte asistencias a la conducción, entre ellas control crucero adaptativo, centrado de carril, frenado automático de emergencia y alerta de tráfico cruzado. También incluye el sistema MI-Pilot, que permite un nivel de conducción semiautónoma en autopistas. Todo este paquete lo pone en línea con lo que se espera de un SUV eléctrico europeo de última generación.
El Mitsubishi Eclipse Cross EV 2026 no es el coupé que hizo soñar a una generación, y probablemente nunca lo volverá a ser, pero sí representa la transformación de la marca hacia una era donde la eficiencia, la tecnología y la electrificación toman protagonismo.
¿El Eclipse eléctrico honra su legado o es simplemente un Eclipse de otro mundo?


