Aunque Scuderia Ferrari, la división de carreras del fabricante de automóviles italiano, puso fin a sus asociaciones con patrocinadores de criptomonedas a inicios de año, terminando sus acuerdos de asociación de varios años con Velas Blockchain, el fabricante de autos ahora aceptará criptomonedas como forma de pago en los Estados Unidos.
A partir de ahora, los clientes estadounidenses que deseen adquirir uno de los elegantes deportivos de Ferrari tendrán la opción de utilizar criptomonedas para llevar a cabo sus transacciones. La gran mayoría de las empresas de alto nivel han evitado las criptomonedas, ya que la volatilidad del bitcoin y otros tokens las hace imprácticas para el comercio. La falta de regulación y el alto consumo de energía también han impedido la difusión de las criptomonedas como medio de pago.
El anuncio de Ferrari representa un avance importante en la adopción de criptomonedas en la industria automotriz. Enrico Galliera, director comercial y de marketing de Ferrari, explicó que las criptomonedas han estado tomando medidas para reducir su huella de carbono al introducir nuevo software y depender más de fuentes de energía renovable. Aseguró que el compromiso de Ferrari de lograr la neutralidad de carbono para 2030 en toda su cadena de valor sigue siendo firme.
Si bien la noticia es interesante y podría dar un empujón a la imagen de las crypto, Ferrari no ha especificado qué criptomonedas aceptará ni proporcionados detalles sobre el proceso de pago. No obstante, este anuncio genera entusiasmo en la comunidad de usuarios de las criptomonedas.
Según el comunicado de Ferrari la decisión se tomó en respuesta a solicitudes del mercado y de los concesionarios, ya que muchos de sus clientes han invertido en criptomonedas. “Algunos son jóvenes inversores que han construido sus fortunas en torno a las criptomonedas. Otros son inversores más tradicionales que desean diversificar sus carteras”.
Es sorprendente ver a una empresa adentrarse en las criptomonedas después de la explosión de la burbuja. Aunque alguna vez se consideró el futuro del comercio, la criptomoneda se ha convertido en una especie de meme. Un ejemplo de esto fue el colapso de la casa de cambio de criptomonedas FTX el año pasado, en el que desaparecieron 9 mil millones de dólares debido a una crisis de liquidez. A pesar de su creciente adopción global, la mayoría de los inversores en bitcoin aún experimentan pérdidas.
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